Vincit qui patitur

Hola, soy Nancy Arroyo. Tal vez me recuerden por editar todas las entradas del blog, revisar los recetarios y demás textos de la SMP.

Siempre he sido alguien que se compromete mucho con lo que hace y si las cosas no salen en el tiempo y forma que quiero, la frustración toma control de todo. Mi licenciatura es algo que, desafortunadamente, no es tan conocida y mucha gente no le da la importancia que merece. Si se lo preguntan, soy lingüista y traductora, egresada de la poderosísima Facultad de Filosofía y Letras UANL y sí, fue un camino muy complicado para llegar a donde estoy.

Por muchos años, la perseverancia ha sido algo clave en mi vida, razón por la cual elegí como título “Prevalece y vencerás” en latín. Puede que suene súper pretencioso y, para algunos, exagerado, pero a veces así es una y ni modo, toca soportar.

Cada domingo hay una tradición familiar, la cual es prender el asador y hacer una carnita asada (fue una gran alegría y dicha para ellos que entrara a la SMP) y es de las veces en las que comemos todos juntos y compartimos un poco de todo. Cada que hay una noticia importante, siempre se da mientras comemos carne asada; cuando obtuve este trabajo, la noticia se dió en esa situación y así muchos ejemplos más.

En alguna de estas ocasiones se platicó que yo ya tenía algo estable y que podía estar próxima a tener mi vida independiente y me di cuenta de lo rápido que había llegado a ese punto. Lo mucho que se me ha permitido crecer, en el ámbito profesional y en lo personal.

Afortunadamente, he podido lograr muchas cosas que he querido, algunas aún siguen en proceso, cuento con la gente indicada a mi lado que siempre me alienta a ir por más y darme el apoyo que necesito. Ha sido un largo proceso, mi camino nunca ha sido fácil y no me considero alguien a quien todo se le ha entregado en bandeja de plata, aunque he contado con mucha gente que me ha ayudado a estar donde estoy.

Mi llegada a la SMP fue el fruto de estas dos. Al egresar de mi carrera, tenía esa ilusión de que todo sería fácil y no habría piedras en mi camino, gran error. Como lo mencioné antes, mi labor no es muy reconocida, por ende, no hay mucho campo laboral. Por años me dediqué a todo tipo de trabajos, desde enseñar inglés a diversos grupos de edades, hasta trabajar en un call center. Y no es que fuera algo malo, simplemente no era lo que yo quería y mucho menos a lo que yo me había esforzado por obtener.

La frustración reinaba cada vez más y más y sentía que iba apagando la perseverancia que yo tenía, hasta que escuchaba los alientos de mis seres queridos. Uno de ellos, Marcos, al cual le debo muchísimas cosas, si alguien puede confirmar o desmentir todo este escrito, es él. Incontables veces me consoló, me empujó a seguir adelante, me regañó por ser terca (cosa que no soy) y me demostró mil veces su amor y paciencia por mí.

Es curioso como muchas veces creemos que podemos con todo estando solos, que necesitamos tener nuestro espacio y que siempre se puede ir pa’ adelante, pero en cuanto escuchamos un consejo de mamá, de algún amigo o pareja, el panorama cambia y hasta se siente reconfortante.

La razón por la que me aventé a escribir esto fue, en parte, como un reto personal y porque nació de esa misma reflexión con mi familia, además de querer comunicar a aquellos que estén atravesando algo difícil de que siempre hay una salida. Antes de llegar a la SMP atravesé por mil y un cosas que no puedo escribir aquí, ya que no quiero que esto se torne en algo más oscuro, pero puedo decir con seguridad que por fin estoy en mí lado seguro. 

Las dificultades que nos pone la vida, los retos y caminos que tomamos nunca sabremos con seguridad si son los correctos o lo mejor para nosotros y lo único que nos queda es tomarlos y sacar lo mejor de ellos. Rendirse siempre será el camino fácil y el que más nos llama la atención, pero nada como la satisfacción de obtener eso que querías. La depresión y ansiedad son algo que desgraciadamente no podemos elegir si lo tenemos o no, pero algo que siempre me ayudó a salir adelante fue saber que no siempre iba a ser así, que, aunque hubiera épocas que parecía que la vida y el destino conspiraban en mi contra, de algún modo les iba a sacar la vuelta.

Hoy estoy agradecida con mi familia SMP, desde que entré no ha habido un día en el que no sienta el apoyo de alguien, siempre me han hecho sentir muy querida. Recuerdo mi primer día con Jacquie y Edith que, desde el primer segundo, me hicieron sentir como si llevara meses en la empresa; con Ely y Daniel que me cantaban “Yo te esperaba” de Alejandra Guzmán y demostrando lo mucho que les alegraba mi llegada. Mi amix Dani Rangel por tenerme la paciencia de explicarme todo lo relacionado con cursos y orientarme en todo lo que necesitaba saber, hasta cosas de gastronomía me enseñó. Todo el equipo de Mkteam y Big Dealers por no dejar a nadie fuera.

Gracias a mi jefecito, Arturo Gutiérrez Dávila, por confiar en mí y por tener la iniciativa de tener este bello departamento de Editorial y poder seguir demostrando que es un campo que importa e impone y seguir trabajando para poder ser lo más eficientes posible.

No ha habido un día que me arrepienta de haber mandado mi solicitud a esa vacante de auxiliar de editorial, agradeciendo siempre a mi familia y amigos, que muy a mi pesar, me decían que siguiera insistiendo.

La fortuna que siento hoy en día es algo que mi yo del pasado nunca se hubiera podido imaginar, pero que nunca se dejó de soñar. Hace poco salí a desayunar con el dueño de mis quincenas y por un momento me quedé procesando quién era y cómo lo había obtenido y no podía caber más dicha en mi ser.

La SMP me ha enseñado a tener mucha paciencia y trabajarla, ayudar a quien lo necesite y siempre estar dispuesta a mejorar en todos los aspectos, tanto personales como profesionales y, por supuesto, compartir este mismo conocimiento con todos. Grill Master HEB 2022 fue la mejor evidencia de esto, nunca me había sentido tan cansada como en ese fin de semana, pero la alegría y satisfacción de ver cómo todos funcionamos como engranes no tiene comparación y la repetiría una y mil veces.

Es cuando nos damos cuenta que la convivencia que se da en las parrilladas no tiene comparación. Siempre se puede convivir en el ámbito en el que sea, pero lo que se transmite en una carne asada es distinto, te da un sentimiento de cercanía que probablemente una fiesta o una salida a un restaurante no te da.

Comparto este cúmulo de ideas con el propósito de que algo resuene en ustedes. Que estando en una carne asada o en una comida familiar, nos pongamos a reflexionar sobre lo que tenemos alrededor, de la fortuna que tenemos de contar con gente que nos y les importamos. De reconocer lo que es nuestro y la friega que nos ha costado tenerlo, que a nadie le regalan las cosas, mucho menos los éxitos, y eso será siempre algo único.

Por último los dejo con una receta de una torta de barbacoa de arrachera con su buena salsa BBQ. Espero que la disfruten.

Ingredientes

  • 5 panes de hamburguesa o bolillo
  • c/n de arúgula
  • c/n de hojas de lechuga

Para la salsa BBQ clásica:

  • 100 g de puré de tomate
  • 15 g de mostaza
  • 3 cdas de vinagre de manzana
  • 2 cdas de miel de agave
  • 1 cda de BBQ Rub Classic SMP
  • 1 cda de salsa inglesa

Para la barbacoa:

  • 2 kg de arrachera
  • 2 cdas de Ultimate Black Rub SMP
  • 2 cdas de manteca de cerdo
  • 2 cebollas blancas
  • 6 dientes de ajo
  • 6 cervezas claras de su preferencia

Procedimiento

Para la barbacoa:

  1. Sazonar la arrachera con Ultimate Black Rub SMP por ambos lados.
  2. Añadir la manteca de cerdo en una olla de hierro vaciado y dejar derretir.
  3. Cortar las cebollas en cubos.
  4. Agregar los ajos y las cebollas a la olla y dejar acitronar.
  5. Sellar la arrachera en la olla por 2 minutos cada lado.
  6. Vaciar las seis cervezas en la olla.
  7. Tapar la olla y colocar cuatro brasas grandes de carbón encima de la tapa.
  8. Dejar cocinar por 3 horas y media a 4 horas.
  9. Deshebrar toda la carne.

Para la salsa BBQ clásica:

  1. Combinar todos los ingredientes en un recipiente hasta obtener una mezcla homogénea.

Para el montado:

  1. Tostar el pan a fuego indirecto en el asador.
  2. Retirar del asador y agregar la barbacoa de arrachera.
  3. Añadir la salsa bbq clásica, la lechuga y la arúgula al gusto.

El fuego y las palabras nos unen.

Nancy Y. Arroyo Flores
Equipo de Editorial

Dejar un comentario

Todos los comentarios son moderados antes de ser publicados